jueves, 5 de abril de 2018

CANJE DE PASAJES. CAPÍTULO II

CARRIÓ SE PELEÓ CON MACRI Y REBATIÓ LOS DICHOS DEL PRESIDENTE PERO, NINGUNO DE LOS DOS TIENE RAZÓN.


Ya quedó claro en mi reciente entrada referida a la cuestión, por qué, a mi entender, Mauricio Macri está equivocado respecto al tema pasajes de los legisladores.

Yo esperaba que "Lilita" saliera a contestarle a su aliado, el presidente de la Nación.
Lo hizo, pero plantó fuera de la maceta.
La diputada dijo: "Macri viaja en helicóptero desde chiquito, así que no tiene problema. Viaja en aviones privados."
Y agregó: "No tiene idea de lo que significa ser decente, hacer política decentemente. Yo me muevo en mi auto, por eso canjeo los pasajes."
Hasta ahí todo bien. Es mas, creo que estas declaraciones son lo mas cierto que dijo en toda su vida. No obstante, aceptemos la rectificación que hizo de sus dichos pocas horas después, al considerar que se le había ido la mano, entonces "aclaró" que había querido decir austero en vez de decente.

Pero en la entrevista a la que estoy haciendo referencia, María Elisa Avelina Carrió, de nombre artístico "Lilita", derrapó cuando dijo: "Durante la campaña recorrí el país veintisiete veces en mi auto."

A la chaqueña habrá que enseñarle la diferencia entre política institucional y política partidaria.
En cumplimiento de su labor legislativa, creo que está muy bien que el Estado le cubra los viáticos. ¿Se debe cambiar la metodología? Sí. ¿Se deben extremar los controles? Si. ¿Se le debe dar el dinero de viático a cada legislador tomando en cuenta los kilómetros que hay entre su lugar de residencia (que tiene que ser el mismo distrito en el que recibió los votos que lo depositaron en su banca) y la ciudad de Buenos Aires, de modo que a un formoseño le quede igual ingreso de bolsillo que a un porteño? Sí. Y hasta tanto no cambie la metodología es válido canjear pasajes por dinero para, con ese dinero, trasladarse por otro medio si el legislador lo cree necesario.
También está bien que haya un plus por desarraigo. Ver a la familia dos dias por semana es un esfuerzo lindante con el sacrificio que debe ser compensado de algún modo.

Hasta allí, hablamos de política institucional. Pero la campaña es otra cosa. Ya entramos a la política partidaria. Por ende, a sus gastos debe afrontarlos el sector político que impulsa su candidatura. Se llame ARI, Coalición Cívica, Cambiemos, o Partido de los Oligarcas. Y, si Carrió cree que la ley de financiamiento de los partidos políticos no permite el crecimiento de los partidos mas pequeños porque paga proporcionalmente a los votos recibidos, tiene razón, pero deberá luchar desde su banca para cambiarla. Nada le da derecho a tomar la plata del pueblo para los viajes de su campaña proselitista. De eso debe hacerse cargo su partido.
Por lo tanto, el ejemplo citado por la diputada no es válido. Está reconociendo que su partido, que debe usar para la campaña los fondos que se le asignan a tal fin, utiliza dinero de todos los argentinos. Eso es desvío de fondos públicos. Y está penado por ley. (¿Alguien le iniciará una causa de oficio o como casi todos hacen mas o menos lo mismo, y teniendo en cuenta que en la actualidad "Lilita" transita por la vereda en la que entibia el sol, el tema pasará desapercibido?)

Carrió,... tiene razón pero marche presa.

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