TRASPARENCIA DE LA INMORALIDAD, LA DESIGUALDAD Y LA INJUSTICIA

Un asesino admite sus crímenes y, por haberlos "trasparentado", no cree ser asesino.

¿Tiene razón? ¿Es válido su argumento?

Con la posible modificación a la ley de financiamiento de los partidos políticos sería inocente. Además, se propone un límite. El acusado no deberá matar mas de una persona por mes. Si mató 11 en el año, no será asesino.

Estos son los principios de las modificaciones que Cambiemos quiere introducir a la ley referida.

La idea es trasparentar (palabra que el PRO y Durán Barba han puesto de moda) el apoyo económico que las empresas (locales o multinacionales) dan a los partidos políticos. Ah!, y poniendo un límite del 3% del total de la campaña electoral.

Desde siempre esto sucede. Hasta ha habido muchos casos en que la misma empresa apoyó a los dos principales candidatos, para asegurarse el "vuelto" los siguientes cuatro años.

Pero que sea frecuente no significa que haya que aceptarlo. Es frecuente que haya robos pero, no por eso deben aceptarse. Y hay miles de ejemplos mas.

Si se pone en vigencia la nueva ley, el empresario podrá decir: "No soy asesino. Y maté sólo a nueve por año." O, lo mismo: "No soy corruptor. Y aporté menos del 3%."

De la inmoralidad de una empresa apoyando dos listas, no hablará casi nadie.

De la injusticia que supone para los partidos políticos que aspiran representar al pueblo y no a los empresarios, la diferencia económica con los partidos que reciben aportes empresariales, no hablará casi nadie.

De esta desigualdad que estará consagrada por ley (cuando toda ley debe buscar lo contrario, o sea la igualdad) no hablará casi nadie.

Y una vez mas la alianza PRO-UCR presentará la nueva Ley como un moderno instrumento para trasparentar la actividad política.

Y de ello, no hablará casi nadie.