LLÁMALE PUTA ANTES DE QUE ELLA TE LLAME ASÍ A TI.

Ya veníamos de los Panamá Papers, en los que estuvo involucrado el Presidente de la Nación y varios funcionarios de la alianza PRO-UCR.

Ya veníamos de Gianfranco Macri, hermano del Presidente, blanqueando millones de dólares que tenía en el extranjero sin dar explicaciones, avalado por cuestiones legales, ya que no morales, gracias a las normas que Cambiemos (Mauri) puso en vigencia.

Ya veníamos del intento de perdonar 70.000 millones que Franco Macri (padre del Presidente) le debe al Estado, como consecuencia de negocios y negociados que siempre hizo a expensas del bolsillo de todos los argentinos.

Ya veníamos del caso Triaca, ministro de ¡trabajo! de la Nación, que tuvo años en negro a su empleada doméstica, la puso como ñoqui en la intervención que dispuso en el SOMU y la puteó, antes de despedirla.

Ya veniamos del caso Lorena Triaca (una de las hermanas del ministro) que se contrató a si misma por 7 millones de pesos en la ciudad de Buenos Aires, gobernada por el PRO.

Seguimos ahora con mas revelaciones: Luis "Toto" Caputo, ministro de finanzas de la Nación, administró una gerenciadora de fondos de inversión en Miami (con ramificaciones en Delaware, paraíso fiscal) cosa que "olvidó" incluir en su declaración jurada, y manejó un fondo de inversión en Islas Caimán, también paraíso fiscal, y de los mas secretos del mundo.

LO MÁS GRAVE ES QUE CAPUTO FUE UNO DE LOS QUE, DESDE SU FUNCIÓN PÚBLICA, NEGOCIÓ LA DEUDA ARGENTINA CON LOS FONDOS BUITRE Y PREVIAMENTE HABRÍA ACONSEJADO A SUS INVERSORES COMPRAR, A BAJÍSIMO PRECIO, LOS BONOS "DEFAULTEADOS" DE LA ARGENTINA.

(CAPUTO, INCREÍBLEMENTE, TODAVÍA NO RENUNCIÓ)

El que sí renunció (cosa que no lo hace honesto) fue Valentín Díaz Guilligan, Subsecretario General de Presidencia de la Nación, que tenía depositados 1.200.000 dólares en una off shore de Andorra, sin declarar.

Y, cada vez más, allí donde se apriete, salta pus.

Pero lo más notable es que este gobierno (desde lo discursivo) ha hecho de la trasparencia una bandera. Desde lo discursivo, reitero...

Y se cansó de sospechar de corrupto a cualquier político, sindicalista o verdulero que no sea afín a Cambiemos.

Mi abuela materna, española ella, contaba que en su pueblo (Ávila de los Caballeros) dos chicas adolescentes discutían de vereda a vereda, calle estrecha mediante. Una le gritaba a la otra: "estúpida", la otra respondía "imbécil". Tras algunos epítetos mas, la madre de una de ellas abre unos centímetros la ventana del frente de su casa y le dice a su hija: "Llámale PUTA, antes de que ella te llame así a ti".